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| El triunfo de Alvaro Uribe Colombia comienza a consolidar su Estado |
Las siete agrupaciones que respaldan al presidente Alvaro Uribe Velez arrasaron en las elecciones legislativas del 12 de marzo, con casi el 70% de los votos, lo que le otorga 61 de los 102 escaños en el Senado y 91 de los 166 en diputados. |
| Es la primera vez que una coalición ajena al tradicional enfrentamiento que recorre la historia colombiana –liberales y conservadores- logra controlar las dos cámaras del Congreso.
En estas condiciones, Uribe obtendría ampliamente su reelección el 28 de mayo, con un triunfo en la primera vuelta, quizás con el 60% o más de los sufragios. El producto colombiano crece a una tasa anual promedio del 4% en los últimos tres años; el año pasado fueron casi 5% (4.7%), con un aumento de las exportaciones del 30%, mientras la inflación fue la más baja en 42 años (4.8%). En este periodo de tres años, la inversión ha crecido 70%, al tiempo que cayeron la pobreza y la indigencia (-7.8% y -6%). El 27 de febrero de este año, Uribe firmó un acuerdo de libre comercio (TLC) con los Estados Unidos. La CEPAL estima que el TLC generará un incremento del producto del 4% en 10 años y sí, además, se practicase una política de calificación de mano de obra que aumentara su nivel 10%, el TLC generaría un aumento del 5.1% en ese periodo. El resultado del crecimiento económico sostenido es una caída de la desocupación, que hoy 10% de la población económicamente activa, el nivel más bajo en una década. Igualmente importante, pero mas revelador, es la caída de la tasa de homicidios, que ha disminuido 34.2% en estos tres año y es hoy la menor en dos décadas. También los secuestros se han reducido 70% en este periodo (2002: 2880; 2005: 800). Son 16.600 los paramilitares (AUC) que se han entregado junto con sus armas, sobre un total de 20.000; sólo en el mes de enero de este año ascienden a 2600 lo que se han desmovilizado. También comenzaron las negociaciones de paz con el Ejercito de Liberación Nacional (ELN), una de las dos principales fuerzas guerrilleras, que dispone de 3600 combatientes. El 70% de la cocaína del mundo proviene de Colombia; y hay una disminución significativa y persistente del área sembrada de coca. Según la ONU, eran 163.000 hectáreas en el 2000, y ahora son 80.000. Fueron destruidos 1900 laboratorios de cocaína en el 2004, 40% más que en el 2002. Naciones Unidas calcula que los resultados colombianos disminuyen la producción de cocaína en todo el arco andino, que ascendió a 655 toneladas en el 2003 tras alcanzar un pico de 950 en 1996. EEUU despliega el Plan Colombia desde el 2000, con un aporte de 3000 millones de dólares anuales; de ese total, y en ese periodo, 3500 millones de dólares lo constituye la ayuda militar. A la asistencia de EEUU se suma el fondo creado por Uribe al asumir en 2003, con un impuesto especial a la clase media y alta para aumentar el gasto de defensa. El resultado es el mayor fortalecimiento del ejército colombiano en toda su historia. Hay una nueva división, 4 nuevas brigadas, 8 brigadas móviles, 6 nuevos batallones de alta montaña y 13 nuevas fuerzas especiales antiterroristas urbanas. También se ha mejorado cualitativamente la capacidad táctica de las unidades; son 8 los helicópteros Black Hawk adquiridos en 2005 y 12 los Bell Ranger, sumados a los 25 aviones Super Tucanos. En estos tres años las fuerzas de seguridad (Policía Nacional y fuerzas militares) se han incrementado 25%, llevándolas a un total de 369.000. También hay un aumento significativo de las unidades operativas, capaces de realizar misiones ofensivas, como parte de una estrategia de ocupación del territorio nacional que ha estado en manos de la guerrilla y el narcotráfico en los últimos 40 años. Lo que ocurre en Colombia con Uribe no es simplemente un gobierno que logra buenos indicadores económicos, sociales y de seguridad. Hay algo más en estos tres años. Colombia parece realizar, por primera vez, la tarea de construcción de un Estado nacional capaz de otorgar seguridad y control a la totalidad de su territorio. “Ningún país de América Latina ha tenido tantos obstáculos para la unidad política y la construcción del Estado como Colombia”, dice David Bushnell (“Colombia, una nación a pesar de si misma”). Agrega Fernando Lopez- Alves, “históricamente, el sistema político colombiano ha sido uno en que los dos partidos tradicionales – liberales y conservadores- emergieron y se consolidaron antes que el Estado; el Estado y el ejercito han sido estructuralmente débiles y el regionalismo excepcionalmente fuerte (con cinco ciudades que se equilibran entre si aproximadamente iguales: Bogotá, Cali, Medellín, Barranquilla y Cartagena); en Colombia, además, la incorporación de los sectores populares a la vida política se ha hecho a través de los partidos y no del Estado.” La historia de Colombia es la de un de sistema de partidos, estable y civilista, fundado en una sociedad profundamente anárquica y extraordinariamente violenta. Quizás ahora comienza a consolidarse en la ecuación política colombiana su flanco más débil, en gran parte ausente: el Estado. Publicado en el diario PERFIL el 19/3/2006 |
| Jorge Castro , 20/03/2006 |
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