Cada vez más lejos del mundo

 


Argentina es el país que más puestos retrocedió (13) en la medición 2005 del Índice de Globalización con respecto al año anterior. Este estudio es realizado desde hace cinco años por la consultora internacional A. T. Kearney y la revista Foreign Policy, del think-tank Carnegie Endowment for International Peace y fue concebido para medir la integración global de las naciones.
Entre los 62 países relevados por el Índice de Globalización – IG – 2005, Argentina ocupa el puesto 47 en el ranking final. Doce meses atrás ocupaba el lugar 34. Esta caída de 13 posiciones es la mayor que se muestra en el listado y está seguida por los descensos de Rusia y Botswana (ambos 8 puestos).

A la cabeza se encuentra Singapur, que desplazó a la segunda ubicación en el podio a Irlanda, que estaba al frente en el IG 2004. Este grupo de 62 naciones representa el 96 por ciento del producto bruto interno del planeta y el 85 por ciento de la población mundial.

El orden de las restantes 8 naciones que completan el top ten en la revisión 2005 es el siguiente: Suiza, Estados Unidos, Holanda, Canadá, Dinamarca, Suecia, Austria y Finlandia. Los diez países que están en los puestos finales (53 a 62) son Perú, China, Venezuela, Turquía, Brasil, Bangladesh, Egipto, Indonesia, India e Irán.

En el ámbito de América Latina, están en posiciones más elevadas que Argentina Chile (34) y México (42).

Analizando la composición del puntaje de nuestro país, puede verse en las tablas que ocupa los lugares menos destacados en las áreas de integración económica (58) - fundamentalmente por las bajas magnitudes relativas de nuestro comercio internacional (53) con respecto al total de la actividad económica - y en la de los contactos personales (56), sobre todo por el bajo volumen de las transferencias internacionales de divisas en el sector privado (55) y el tráfico telefónico con otros países (47). La mejor ubicación de Argentina se corresponde al área que el IG denomina compromiso político (20), debido primordialmente a la cantidad de tratados internacionales a los que está adherido (6). Quizás muchos puedan razonablemente llegar a la conclusión que internacionalmente Argentina es mucho más activa en el momento de poner la firma que en su intensidad en el despliegue de su quehacer en el escenario global. Casi igual como se desarrolla la actividad política dentro de nuestras fronteras, centrada en el internismo, la chicana mediática y el clientelismo, pero eludiendo con fiel perseverancia el análisis y el debate estratégico que permita definir y consensuar hacia dónde marcha nuestro destino como país.

El trabajo de A. T. Kearney y Foreign Policy chequea los cambios en cuatro sectores claves:

• En la integración económica se combinan datos de los ingresos y egresos por el comercio internacional y la inversión extranjera directa.

• En el contacto personal se cuentan los viajes, el turismo y el volumen del tráfico telefónico internacional, así como las transferencias de divisas a través de las fronteras realizados entre las personas o entre instituciones privadas.

• La conectividad tecnológica enumera los usuarios de Internet, los servidores conectados a esta red y los servidores con seguridad, a través de los cuales se pueden cursar transacciones encriptadas.

• Finalmente, el compromiso político incluye las membresías de cada país en un conjunto de organizaciones internacionales representativas, las contribuciones financieras o en personal en las misiones de paz de las Naciones Unidas, la ratificación de un grupo de tratados multilaterales y los montos de las transferencias en ambas direcciones que realizan los gobiernos.

Para la mayoría de estas variables se suman los flujos de entrada y salida de cada país y el resultado se divide por su producto bruto interno o, cuando es más apropiado, por su población. Solamente dos indicadores del ámbito del compromiso político se toman como números absolutos: la pertenencia a organismos internacionales y el número de tratados ratificados.
Traducción Luis Candurra , 30/06/2005

 

 

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