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LA CRISIS ECONOMICA ARGENTINA: CAUSAS Y REMEDIOS |
Jim Saxton (representante por Nueva Jersey), Vicepresidente Comité Económico Conjunto Congreso de los Estados Unidos de América . Viene de |
III. ¿QUÉ PODRÍA HACER LA ARGENTINA AHORA?
Hace 75 años, la Argentina era uno de los países más ricos del mundo, con un ingreso per cápita mayor que el de Francia, Alemania o Suecia. Hoy es un país pobre. Argentina ha experimentado un crecimiento económico a largo plazo, pero ha sido extremadamente lento. ¿Qué podría hacer la Argentina para aumentar el ritmo de su crecimiento económico?
En la esfera monetaria, podría dolarizar -reemplazar el peso por el dólar como moneda oficial. Ecuador y El Salvador han dolarizado pocos años atrás, obteniendo resultados mayormente favorables. La otra opción principal, un tipo de cambio libre combinado con una selección de objetivos ("targeting") explícitos o implícitos con respecto a la inflación ha funcionado bastante bien en otros países, pero en la historia Argentina, un tipo de cambio libre siempre ha estado asociado a la inestabilidad económica.
El gobierno de Duhalde redujo tasas de algunos impuestos pero aumentó otros, en particular en los productos de exportación. La experiencia ecuatoriana, que en el año 2000 combinó la dolarización con otras reformas económicas, sugiere que hay espacio suficiente para empezar a recorte impositivo. En Ecuador, la recaudación de impuestos (sin contar los provenientes del petróleo) ha aumentado de $2.500 millones en el año de la depresión, 1999, a un nivel proyectado de $4.900 millones en 2003, gracias al crecimiento económico y a un sistema de recaudación mas eficiente. La recaudación aumentó, pese a que el gobierno eliminó un impuesto a las transacciones financieras que en 1999 había producido el 13 por ciento de las recaudaciones no relacionadas con el petróleo.
El sistema bancario argentino se está recuperando luego del desastroso año 2002. Su salud a largo plazo dependerá de si la economía es capaz de crecer desde cero en lugar de simplemente esperar el efecto rebote de la depresión. Las perspectivas de Argentina con respecto al pago parcial de la deuda estatal que ha entrado en default también dependerá mayormente del crecimiento económico.
En el largo plazo, Argentina se enfrenta a varios obstáculos para el crecimiento en muchas otras áreas. Estos obstáculos son bien conocidos dentro y fuera de Argentina, y todos ellos han sido ampliamente estudiados.
El estado de derecho. El estado brinda una débil protección frente a las apropiaciones de propiedad privada. El sistema judicial es conocido por su ineficiencia y corrupción. El crimen violento se convirtió en un grave problema cuando la recesión se convirtió en depresión.
Relaciones financieras entre el gobierno federal y las provincias.
La coparticipación en la recaudación federal de impuestos debilita el vínculo entre los impuestos que cobran las provincias y los ingresos que gastan. El gobierno federal no ha querido ponerse firme con las provincias qe están esencialmente en bancarrota. Por ende, las provincias enfrentan una débil disciplina financiera.Gastos del gobierno. Los gastos en pensiones y salarios de los empleados del gobierno, incluyendo a los empleados superfluos, comprende una parte del presupuesto mayor de lo deseable para un país con el nivel de desarrollo económico de Argentina. Muchos gastos carecen de transparencia.
Trabajo.
Las inflexibles leyes contribuyen a una tasa de desempleo alta. Los empleadores deben pagar abultadas indemnizaciones por despidos, de modo que la probabilidad de que los empleadores se animen a contratar empleados que puedan no resultar bien, es menor que la de los Estados Unidos. El Instituto Nacional de Estadística y Censo (INDEC) calcula que el 40 por ciento de los asalariados trabaja en la economía informal. (Muchas de esas personas tienen un primer o segundo trabajo en blanco.)
Salud.
El servicio de salud estatal es deficiente.
IV. IMPLICANCIAS POLÍTICAS DE LA EXPERIENCIA ARGENTINA
Política con respecto a las crisis internacionales financieras.
Prácticamente cada año desde la crisis financiera de México, han habido crisis en algún país emergente grande, así como en países emergentes más pequeños. Algunas de estas crisis repercutieron en los mercados financieros de EE.UU. La respuesta de los Estados Unidos y otros países ha sido intensificar el estudio de los problemas involucrados, adelantar algunas soluciones, y fortalecer la cooperación financiera internacional por varios medios. Sin embargo, desde 1994, ni el gobierno de EE.UU. ni aparentemente ningún otro gobierno, han articulado un punto de vista detallado acerca de cómo solucionar las crisis. Los principales temas relacionados con las crisis financieras internacionales recientes son los regímenes de tasas de cambio; las regulaciones financieras; el rol de instituciones financieras internacionales, en especial del Fondo Monetario Internacional (FMI) para resolver crisis; y la reestructuración de deudas de gobiernos y del sector privado. Los funcionarios estadounidenses ya han expresado ideas con respecto a cada uno de éstos temas, pero aún no han sido reunidas en una visión clara y detallada. Esta no debiera ser grabada en piedra, pero debería reflejar lo que piensan los funcionarios que han aprendido de la experiencia de las crisis desde 1994, y debería servir como guía para futuras políticas. A falta de una visión clara, la comunidad internacional no ha tenido consistencia en su manera de tratar a la Argentina, lo cual contribuyó a las políticas erráticas tomadas por los gobiernos argentinos.Leyes de los EE.UU. sobre confiscaciones de propiedad por parte de otros estados. Algunas de las acciones del gobierno de Duhalde han tenido el efecto de apoderarse de propiedades, o de anular contratos con ciudadanos y corporaciones estadounidenses. Existen varias leyes en los EE.UU. cuyo objetivo es desalentar que los gobiernos extranjeros lleven a cabo tales acciones.[10] Por lo general, estas leyes no han sido aplicadas por las sucesivas administraciones norteamericanas, ni el Congreso ha presionado por hacerlas cumplir. Dado que esas leyes son como "letra muerta", la obvia pregunta es si su continuada existencia sirve a algún propósito.El comportamiento del FMI para con la Argentina. La Argentina se ha creado sus propios problemas, pero el FMI ha cometido un cierto número de errores al aconsejarla, y en los cursos de acción que ha tomado con respecto dicho país. El FMI apoyó los aumentos impositivos para equilibrar el presupuesto del gobierno argentino, si bien no de buen grado. Aumentar la carga impositiva (la "cuña" impositiva) que ya era alta para la economía en blanco, desalentó el crecimiento económico.[11] Los funcionarios del FMI que han escrito o hablado para el público se han equivocado repetidamente en la caracterización del sistema de convertibilidad argentino como un sistema de cambio a tasa fija, ("currency board"), lo cual no era así. Por ejemplo, a diferencia de una caja de conversión ortodoxa, permitía que el ratio de reservas extranjeras para responsabilidades de naturaleza monetaria se desvíe del 100 por ciento. Los funcionarios del FMI han estado, según se informa, a favor de la devaluación del peso, lo cual demostró ser enormemente problemático, porque pensaban que estaba sobrevaluado, pese a que los cálculos en los informes del propio país del FMI acerca de la Argentina indicaban lo contrario. Desalentaron la consideración de la dolarización (el reemplazo del peso por el dólar como moneda oficial), en parte por la equivocada razón de que sería técnicamente imposible de llevar a cabo.
[12]Hacia mediados de 2001 se hacía evidente que las políticas intentadas por Argentina no lograban restablecer el crecimiento económico ni reducir el ritmo del endeudamiento del gobierno. Sin embargo, en septiembre de 2001 el FMI decidió por sí solo que prestarle más dinero sería malgastar recursos, y canceló el desembolso del resto del préstamo.Cuando el Congreso de los EE.UU. aprobó un aumento en la contribución de los EE.UU. al FMI en 1998, fijó ciertas condiciones. Una de ellas fue que en los casos en que un país experimentara dificultades en el equilibrio de pagos provenientes de una súbita gran pérdida de confianza, el FMI debía recargar la tasa de interés al menos un 3 por ciento por sobre la tasa normal.[13] Esta disposición se originó en el Acta de Transparencia y Eficiencia del FMI de 1998, presentada por el Representante Jim Saxton, entonces presidente del Comité Económico Conjunto.[14] Tres cuartas partes de los casi $25.000 millones en préstamos aprobados por el FMI para Argentina desde que el Congreso impuso esa condición han sido otorgados con la tasa de interés normal (la "tasa de cargo ajustada"). Su promedio durante abril y mayo de 2003[15] fue del 2,29 por ciento anual. Sólo una cuarta parte fue prestada según las tasas del Servicio de Reservas Suplementarias ("Supplemental Reserve Facility") que siendo de 3 a 5 puntos mas altas, aún están muy por debajo de lo que el estado argentino pagaría si tomara el préstamo del mercado de capitales internacionales.El 5 de septiembre de 2002, el FMI permitió que Argentina demorase el pago de unos $2.800 millones en préstamos por un año. El 14 de noviembre, Argentina entró en default en un préstamo con el Banco Mundial. Se salteó un pago al Banco Interamericano de Desarrollo con vencimiento al 15 de enero de 2003; y amenazó con dejar de pagar los préstamos al FMI a partir del 17 de enero. Argentina es uno de los mayores deudores de estas tres instituciones. Un default de Argentina habría roto con el mito de que no existen riesgos significativos de default por parte de los países miembros.[16] Para preservar el mito, los países industrializados principales accionistas del FMI presionaron para que se renovasen los vencimientos hasta agosto. Se informó que el FMI se resistía a renovar porque los procedimientos normales apuntaban a la no-renovación. El 17 de enero de 2003, el director ejecutivo del FMI anunció que recomendaría la renovación, para que Argentina no cayera en el default, pese a que no había efectivizado el pago próximo a vencer. El 24 de enero, la junta del FMI aprobó un total de $6,800 millones en préstamos, cuyo efecto fue que Argentina no debiera pagar ningún préstamo anterior con vencimiento previo a agosto 2003. En efecto, Argentina quiso quedar como "el más gallito" frente a las instituciones financieras internacionales y sus principales gobiernos accionistas, sentando un mal precedente para otros grandes deudores. Préstamos, rescate, depreciación y default.
Enfrentados a una escalada de problemas, los gobiernos de Argentina y otros países en desarrollo han seguido con frecuencia un modelo con cuatro etapas: pedir préstamos al sector privado doméstico e internacional; buscar el rescate del FMI y otras fuentes del sector público internacional cuando el sector privado deja de prestarles dinero; depreciar la moneda a modo de obtener recursos del sector privado doméstico, para que el gobierno pueda continuar con los pagos a sus acreedores; y si eso no funciona, entrar en default. El comportamiento de Argentina fue inusual, dado que entró en default poco antes de devaluar en lugar de hacerlo después de la devaluación.Los defaults de Rusia en agosto de 1998 y de Argentina en diciembre de 2001 traen la pregunta de si los pasos segundo y tercero aportan algún beneficio para los países que pagan altas tasas de interés en sus deudas estatales. Para el momento en que el FMI otorgó sus últimos préstamos a Rusia y Argentina antes de que entrasen en default, éstos países enfrentaban problemas que no eran pasajeros, ni podrían sobreponerse a ellos con uno o dos años de respiro de los préstamos del FMI. Por el contrario, se enfrentaban a problemas a largo plazo para financiar su deuda interna, dada la política financiera que venían siguiendo. Los rescates aumentan una deuda estatal que ya era alta. La depreciación de la moneda puede ser desastrosa para las compañías que han pedido préstamos en dólares o en alguna otra de las principales monedas extranjeras; y esos créditos a menudo son la única manera de obtener financiamiento a mediano o largo plazo a tasas de interés predecibles. Es verdad que si los gobiernos deben entrar en default, deben hacerlo cuanto antes, evitando devaluar su moneda con el fin de aumentar los recursos del estado para el pago a acreedores extranjeros. La organización de un default ordenado, sin embargo, no es fácil. El gobierno de los EE.UU. en colaboración con otros gobiernos y con el FMI, intenta desarrollar procedimientos que ordenarían los futuros defaults, sin alentar defaults por el mero hecho de que a un gobierno le importunen sus deudas.La importancia de los derechos de propiedad en la prosperidad. Las políticas económicas del gobierno de Duhalde violaron los derechos de propiedad mantenidos con gran esfuerzo durante al menos la última década. La tendencia del gobierno de Duhalde y de muchos observadores ha sido la de tratar a esos cambios como meras diferencias técnicas, negando su naturaleza revolucionaria. En noviembre de 2001, Argentina era un país en el cual generalmente se cumplían los contratos (si bien no a la perfección); los depósitos estaban seguros en los bancos; las personas tenían libertad para comprar y vender moneda extranjera según les pareciera apropiado; había un bajo control de precios; y el gobierno había respetado sus contratos con las compañías, incluyendo varias extranjeras, que estaban modernizando la infraestructura argentina. Para febrero de 2002, la Argentina se había convertido en un país en el que nadie podía confiar en un contrato; el gobierno había congelado los depósitos bancarios; la gente se arriesgaba a ser encarcelada por la compraventa de moneda extranjera a tasas de cambio del mercado; muchos bienes estaban sujetos a control de precios; y el gobierno había quebrantado los contratos que habían alentado las inversiones extranjeras en infraestructura.Cuando no están asegurados los derechos de propiedad, invertir a futuro se torna muy riesgoso, y la actividad económica se enfoca en lograr ganancias a corto plazo, más que en realizar inversiones a largo plazo que instalen mejoras permanentes en la productividad. Para Argentina, el crecimiento económico a largo plazo requerirá que se respeten los derechos de propiedad en lugar de que se los viole frecuentemente, como ha estado sucediendo durante el último año y medio.
Kurt Schuler
Economista.
Asistente especial del Vicepresidente
.NOTAS:
1] Ver http://www.house.gov/jec/new-prdt.htm
[2] Ley 23.928. La Ley de Reforma del Estado (Ley 23.696, 1989) fue la otra ley clave en este período
.[3] Decreto 2128/1991. El símbolo "$" simboliza pesos en Argentina, pero aquí significa sólo dólares. (para volver al texto, haga clic en el número de cada nota)
[4] Leyes 25.414 y 25.443.
[5] Ley 25.445. El Poder Ejecutivo Argentino tiene facultades de presentar proyectos de ley directamente ante el Congreso.
[6] Oficialmente, el despido de Pou se debió a que una investigación del Senado Argentino encontró poco estrictos los procedimientos por parte del Banco Central en controles de lavado de dinero. Extraoficialmente, la investigación se vio como una excusa para probar si el banco central mantendría suficiente independencia para conservar el sistema de convertibilidad cuando el presidente De la Rúa quería modificarlo. (para volver al texto, haga clic en el número de cada nota)
[7] Promulgada por Decreto 803/2001, efectivo el 19 de junio de 2001
[8] Las estadísticas son del Instituto Nacional de Estadística y Censo.
[9] Argentina, Ministerio de Economía, Resoluciones 6/2002, 668/2002, y 236/2003; Banco Central de la República Argentina, Comunicación "A" 3827; Argentina, Decreto 739/2003.(para volver al texto, haga clic en el número de cada nota)
[10] Código de los EE.UU., Título 22, sección 283r, sección 284j; sección 2370, subsección (e); sección 2370a, subsecciones (a) y (b)
.[11] En cuanto al apoyo del FMI al aumento impositivo, ver "Press Conference by Stanley Fischer, IMF Acting Managing Director," 13 de abril de 2002, en http://www.imf.org. El 16 de noviembre de 2002 el gobierno de Duhalde redujo el impuesto al valor agregado del 21 por ciento al 19 por ciento. El FMI presionó para que se diera marcha atrás con la medida, lo cual sucedió el 16 de enero de 2003: "Presión del FMI: el IVA vuelve del 19 al 21% para recaudar más", Clarín, 15 de enero de 2003, en http://www.clarin.com.
[12] En el sitio de Internet del FMI hay numerosos ejemplos en papeles de trabajo y discursos que no atinan a distinguir entre el sistema de convertibilidad y el sistema ortodoxo de tabla de cambio con tasa fija. En cuanto a su preferencia por el peso de libre flotación, ver el artículo de Anthony Faiola, "Argentina Plans to Devalue Peso; Anxiety Mounts", Washington Post, 5 de enero de 2002, p. A17. En cuanto a la sobrevaluación, compare los comentarios de Anne Krueger, directora ejecutiva del FMI, economista de alto rango, con los cálculos del personal del FMI sobre la tasa de cambio efectiva real ajustada por los costos laborales (Anne Krueger, "Crisis Prevention and Resolution: Lessons from Argentina," 17 de julio; Fondo Monetario Internacional, "Argentina: Third Review Under the Stand-By Arrangement, Request for Waivers and Modification of the program," 14 de mayo de 2001, p.10). También fue Krueger quien dijo que la dolarización no era técnicamente factible en aquel momento; ver Anne Krueger, "Transcript of a Press Briefing (Teleconference) on Argentina," 11 de enero. Todo el material del IMF se encuentra en http://www.imf.org. (para volver al texto, haga clic en el número de cada nota)
[13] US Statutes at Large, v. 112, part 4, p. 2681-219.[14] 105o Congress, H.R. 3331.[15] Los países que reciben préstamos condicionados ("stand-by loans") pagan un interés adicional del 1 por ciento por pedir préstamos excediendo el 300 por ciento de sus cuotas. Al 30 de abril de 2003, la Argentina debía fondos al FMI por el 501 por ciento de su cuota.[16] Otros países miembros han entrado en default, pero sus préstamos eran menores.
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Jim Saxton , 07/03/2004 |
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