Cambio, Cambio, Pago Más...

 

El control de cambios que el gobierno restauró la semana pasada también protege nuestro patrimonio histórico y cultural: entre otros efectos, promovió la reaparición de los Arbolitos en las veredas del microcentro.
El año 2001 será recordado en la historia monetaria mundial fundamentalmente por dos eventos de magnitud:


* Será el último en que circularán billetes y monedas nacionales en 12 países europeos, ya que, desde el 1° de enero próximo serán definitivamente suplantados por sus equivalentes en euros, la unidad monetaria de la Unión Europea.


* Este año alcanzó su real madurez el mercado de cambios online y las transacciones electrónicas del mercado más grande del mundo capturaron una porción significativa de las operaciones.


También en la Argentina, en la primera semana de diciembre y gracias a las medidas financieras y cambiarias del gobierno de De la Rúa, sucedió un hecho significativo, aunque muchos pesimistas se hayan ocupado de calificarlo como una involución y no un avance comparable a los anteriores: Volvió el Mercado Negro - para otros Libre - de Cambios y reaparecieron en la "city" porteña los añorados Arbolitos, esos auténticos cuentapropistas callejeros de las transacciones monetarias.

Estas dos instituciones habían desaparecido durante una década, a partir de las reformas estructurales realizadas por el gobierno de Menem, que incluyeron la Ley de Convertibilidad y la libertad cambiaria.

La etapa dual simple quedó atrás

Para calmar los ánimos de los mencionados pesimistas, debe destacarse que dejan de lado una auténtica diversificación en el quehacer de ambas instituciones: tanto el "mercado paralelo" o "azul" - eufemismos periodísticos y de la city de los años 80 para no mencionar la palabra negro o libre, que sería la única aplicable - como los arbolitos han dejado atrás - muchos creen que para siempre - la denominada "simple etapa dual".

Durante aquellos años en que las operaciones cambiarias no autorizadas expresamente por el BCRA constituían - al igual que ahora, nuevamente - un delito penal, el 95 % o más de las transacciones entre distintas monedas en el Mercado Libre y el 100 % de las ejecutadas por los Arbolitos, se concentraban en dos unidades: el dólar estadounidense y el austral. La triangulación (añadir a este arbitraje fundamentalmente bipolar una tercera moneda) era una especialidad compleja, de delicados equilibrios, que sólo dominaban los expertos operadores mendocinos y los escasos de la Patagonia (arbitrando también contra pesos chilenos) y los más numerosos de la Triple Frontera (estos últimos, unos verdaderos trapecistas de los más grandes circos, ya que al dólar y el austral añadían, temeraria y simultáneamente, el peso guaraní y el cruzado).

Hoy, aquella secreta sabiduría que entonces estaba reservada sólo para unos pocos elegidos (por la necesidad geográfica), ha cerrado esa perversa "brecha del conocimiento": tanto el Mercado Libre (el único que existe para gran parte de la demanda, ya que el viernes 7 la mayoría de los bancos y la casas de cambio no tenían dólares para vender, a ningún precio) como los Arbolitos porteños triangulan con soltura entre pesos , dólares y patacones. Y se aprestan a ampliar la gama, en cuanto la demanda lo requiera, hacia los lecops, quebrachos y todo otro bono nacional o provincial que la heterodoxa "ingenieria financiera" impulsada y fomentada desde el gobierno nacional pueda llegar a crear en los tiempos que parecen venir.

Por cuestiones como éstas, el sistema económico argentino había sido sabiamente caracterizado, durante décadas, por una concisa y esquizofrénica definición: vivíamos, simultánea y cotidianamente, en "un socialismo sin plan y un capitalismo sin mercado".

A comienzos de esta semana, en taburetes contiguos de "El Patacón" - un delicatessen sobre la calle Sarmiento, a metros de la esquina con San Martín, que hiciera célebre un ex presidente del Banco Central quién afirmaba, ingenuamente convencido, que en su barra era donde los operadores fijaban el precio del dólar en el Mercado Libre - un cambista de larga experiencia y comprobada trayectoria le preguntaba a un colega:

"¿Decime, Raúl, desde hace unos días no te sentís como rejuvenecido, como si te hubieran quitado diez años de encima?".
Agenda Estratégica , 12/12/2001

 

 

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